La sesión comienza en su celda, cuando acaban de recuperar la conciencia. Poco después llega el kraken, les dice lo descontento que está y afirma que les dará una última oportunidad: ya que no pueden matar lagartijas, deben sacarlas de su guarida, así como todo su tesoro, etc. Pasa un papel con el juramento correspondiente, que todos hacen ya que no tienen otra opción.
Belarak purifica el pescado podrido, de manera que aunque sepa horrible, no los intoxica. Se acuestan a descansar, montando guardias (salvo Alexandir, que afirma que nada le importa y que quiere dormir). En sueños, al humano se le aparece un mensajero de Miribi (un tritón), quien comunica que el adivino los rescatará y les ayudará en sus empresas, pero si juran ayudarle pronto a recuperar su sultanato: él es el verdadero Sultán de Mirabar.
Pide a Alex que comunique el mensaje a los demás, para que juren vía mensaje mental (sending). Sin embargo, el eldricht knight teme que el kraken los escuche aún si murmuran, así que prefiere guardar silencio. No mucho después de despertar, recibe el sending de Miribi y jura como se le pidió. Acto seguido, Belarak recibe el mismo mensaje, pero como no tiene la información correspondiente, no entiende nada.
Durante ese día Sthlyfaugh aplica su ritual y llega a noveno nivel. Al día siguiente, Alex recibe mensaje de Miribi, quejándose de que el druida no juró. El humano responde diciendo que lo hará, que no hay que preocuparse. Una hora después, Belarak recibe mensaje nuevamente, y responde que sí jura, pero que no sabe qué tiene que jurar. Pasa un día más, donde Sthlyfaugh y Boram reciben sendings de Miribi, conminándolos a jurar, pero no entienden de qué se trata.
Comentan el punto, y entonces Alexandir les relata su sueño. Deciden jurar, pues no tienen otra opción, y porque casi cualquier cosa es mejor que hacer maldades en aras del kraken. Por otra parte, el “amo” aparece y les pregunta que si ya están listos para su nueva misión, a lo que responden afirmativamente. Entonces les entrega su equipo (salvo scrolls, pociones, spellbook de Boróngoron, brújula, Stone of Earthen Peace, monedas y gemas). También llega un elemental de agua que se lleva el pescado podrido que queda y limpia la celda, y luego el mismísimo amo les entrega una ración de pescado fresco.
Comen, descansan, preparan hechizos. Mientras desayunan, Belarak y Boram reciben sending de Miribi, a lo que responden jurando como lo pide el adivino. Llega el kraken, los saca de la jaula, los desmaya. Despiertan y continúan durante horas. Finalmente llegan a la guarida del bronze dragon que atacaran antes. Su misión es introducirse por la misma entrada que la vez anterior y sacar al dragón por la otra. El kraken esperará afuera.
Entran y avanzan como hasta la mitad del túnel cuando escuchan la voz, ya conocida, del dragón. Les ordena que no avancen y que hagan manifiestas sus intenciones. Replican que el kraken los envió a matarlo, y que mejor entre todos luchen contra el gran monstruo. El dragón reonoce las voces… lo que lo hace desconfiar mucho. Por otra parte, sabe que la presencia del kraken probablemente sea real, pues la vez anterior lo persiguió.
Razonando que salir de su guarida es demasiado riesgoso, presenta batalla en el túnel. Aunque logra herir fuertemente a Sthlyfaugh, no es lo suficientemente poderoso como para vencer al grupo en un lugar cerrado: todos hasteados, curándose constantemente, un elemental de agua conjurado cada ronda, los sneak attacks del rogue… Pronto nota que está perdido y decide luchar hasta la muerte.
Alexandir, apoyando con glitterdust y otros hechizos, trata de comunicar ocultamente al bicho que puede huir o hacerse el muerto. De hecho, castea un haste que también lo afecta. Aunque los compañeros del eldricht knight no captan el mensaje secreto y creen que quiere dar todo por el amo, ya sea por admiración o por miedo, el dragón sí entiende y, al verse afectado por el haste comprende que fue adrede, así que emprende la huida. Sin embargo, los elementales conjurados lo atacan cuando trata de irse, de manera que cae.
Revisan su tesoro: cosas muy bonitas, que desafortunadamente serán para el kraken. Belarak estabiliza mágicamente al reptil y ahí lo dejan. Revisan el lugar y notan que no hay nada más. Salen con el tesoro. Afuera está el “amo”, quien les pregunta por el dragón y, al saber que está muerto dentro de la guarida, les pide que saquen el cadáver.
Sacan el cuerpo. El kraken lo revisa y, al constatar que aún vive, notan ese brillo especial que se presenta en el Gran Ojo cuando está complacido. Los toma a todos y se aleja un par de horas. Entonces se detiene y les dice que monten su rope trick, para que puedan aguantar el camino de regreso sin ahogarse.
Alexandir castea, todos entran, se disponen a descansar.
Fin de la sesión, en 13 Viento 13306.
1600 xp por cabeza
Comentario
Jamás pensé que se llegara a dar este encuentro. Me imaginé que harían todo lo posible por lograr ser rescatados antes de la siguiente “misión”. De hecho, tan no lo pensé que ni siquiera lo había preparado… Estaba seguro de que huirían cerca del principio de la sesión. Hubo confusión con el mensaje de Miribi, pero aún así, si hubieran logrado que el kraken les concediera uno o dos días antes de la misión… Pero bueno, todo tiene pros y contras, aunque hacer misiones para Herr Krak tiene más contras que pros, sobre todo para uno que yo conozco…