Comienza la sesión cuando se cierra la puerta que conduce al remolino y se abre otra al fondo del pasaje, dejando ver un cuarto de forma más o menos esférica en cuyo fondo hay un trono de lodo, donde está sentado un ser de tamaño humano pero hecho de lodo, con los rasgos poco definidos y los miembros cortos y gruesos. En el regazo tiene una bola de lodo, a la cual acaricia.
Los aventureros pasan y tanto Miztli como Aria se presentan formalmente. El Lodoso responde el saludo y los felicita por haber llegado hasta él, aunque no todos lo hayan logrado… “Sólo los mesurados y prudentes”, afirma.
Les comunica que su último reto es pelear contra su mascota, llamada Belfo. Recuperan toda su vida y sus habilidades, así como los usos por día de los objetos que tienen, pero no los que se gastan de manera irrecuperable, como scrolls y wands. Les pide que se preparen y avisen cuando estén listos.
Los aventureros se buffean, considerando con cuidado el orden para dejar al final los de poca duración. Cuando afirman estar preparados, el Lodoso hace un ademán y el cuarto se agranda muchísimo, adquiriendo una forma como de huevo, al tiempo que la bolita de barro se convierte en un dragón de lodo. El agua empieza a enturbiarse rápidamente, pero de repente escuchan la voz del lodoso: “bueno, les dejo la luz”, y ésta se aclara otra vez, permitiendo una visibilidad total en todo el recinto, mucho mayor que en un entorno acuoso en el Plano Combinado o en las condiciones normales del Plano Elemental del Agua.
Belarak, como cabía esperar, empieza a conjurar un poderoso elemental de lodo. Aria castea project image. Alexandir empieza a conjurar un shadow demon. El dragón se mueve un poco y genera una bola de lodo a su alrededor. Miztli también se aboca a llamar unos calamares gigantes.
El druida continúa invocando elementales poderosos, mientras Aria intenta dispelear la bola de lodo, sin lograrlo. En cuanto llega el shadow demon, Alexandir se teletransporta con él y el druida a las cercanías de la bola de lodo, contra la que lanza un prismatic spray, mientras su conjurado hace lo propio con una fireball de shadow evocation, aunque no parece haber efecto alguno. Todos se concentran en destruir la bola de lodo o atacar al dragón que está dentro, incluyendo al nuevo conjurado del druida, que es un elemental de agua, y a los calamares del enano que llegan gracias a su jet. Después de un par de rondas consiguen diseminar el lodo casi por completo, con lo que queda claro que el dragón no está ahí… a menos que esté invisible.
El humano sabe de inmediato lo que debe hacer: extrae una poción de see invisibility y la bebe, lo que le permite ver que la mascota está en otra zona del recinto y a mayor profundidad. Grita su localización e indica al shadow demon que lance un glitterdust de shadow conjuration, pero el hechizo no tiene efecto. El hobbit se castea true seeing y la semielfa trata atinarle con un glitterdust real, pero no lo logra. El clérigo indica a sus ahora cinco calamares gigantes que ataquen la zona.
Pero el dragón se mueve y se concentra, una y otra vez, como pueden notar claramente Alexandir y Belarak. Los calamares y los elementales llegan siempre a donde ya no está. En eso… el druida consigue conectarlo con un faerie fire, haciendo irrelevante su invisibilidad.
Lo atacan entre muchos, incluyendo a Alexandir y Miztli, así como a varios calamares y elementales recientemente hasteados por Aria, pero el dragón responde con un prismatic spray que, además de dañar un poco a algunos, hace desaparecer a Alexandir…
El dragón, atosigado por la nube de criaturas que lo rodea, se concentra en destruirlas. Esto resulta ser un error, pues en un momento Belarak le aplica un finger of death, además de que Aria finalmente consigue conectarle un greater dispel magic, que elimina la magia que le ayudaba, aunque también el faery fire que le casteara el druida…
Después de eso, viene su declive: aunque se invisibiliza, Miztli sigue las indicaciones de Belarak para revelar su presencia gracias al scroll de invisibility purge que activa; la bardo lo glitterdustea y él lo dispelea de manera efectiva, pero pierde un tiempo precioso; los summoneados, bajo el haste y el good hope de Aria, empiezan a hacer cierta merma, leve pero constante, y un elemental de lodo consigue envolverlo en su capa de barro entorpecedora; el druida intenta otro finger of death, que si bien no tan efectivo como el primero, suma al daño recibido por la mascota… Hasta que finalmente un hachazo del enano reforzado por un crítico de calamar, terminan con él.
De inmediato, el lugar recupera sus proporciones originales y los aventureros se ven suave pero firmemente conducidos a la plataforma donde llegaran originalmente. Con ellos se encuentra también Alexandir, quien de hecho había estado ahí desde que desapareciera, pero sin poder actuar ni ser detectado de manera ninguna. El Lodoso los felicita y les advierte que, nuevamente, no deben abandonar la plataforma donde se encuentran. Aria, aunque ve al Lodoso acariciar otra vez la bola de barro en su regazo, siente cierta preocupación por Belfo y la comunica, a lo que el Lodoso responde que él está bien, y la bola ronronea.
Después el Lodoso hace entrega de un regalo especial para cada quién. Aunque tal vez no sea lo que más deseen en la vida, es algo que siempre habían querido. Los felicita otra vez y les dice lo siguiente:
“Espero que sigan conociendo vértices. Al haber conseguido superar tres, creo que merecen saber un poco más del asunto.
“Primero, estructura de los vértices elementales: todos tienen dos retos que se superan individualmente y dos que se superan en conjunto. Ayudarse en los individuales hace que el grupo sea más fuerte para los que son en conjunto. En general, se tiene primero un combate contra varias criaturas (individual), después un acertijo (grupal), luego un “ambicioso”: un entorno hostil que proporciona más riqueza conforme más tiempo se permanezca en él, pero también aumenta el riesgo de muerte en proporción al tiempo; ese reto también es individual. Finalmente hay un combate contra una sola criatura, que se resuelve de manera grupal, como han constatado (dice mientras mira a Alexandir). Como les decía, espero que sigan conociendo vértices, así que esta información les puede ayudar.
“Pero también quiero hablarles de la función de los Vértices Elementales, sobre todo porque estamos en un momento muy particular. En la Rueda hay constantemente un plano en formación. Dicho plano comienza con los elementos que lo conforman totalmente separados: los planos elementales. De inmediato se forman los vértices elementales, que son el punto de comunión entre cada par de planos elementales, y se les asigna un guardián. No me extenderé en el aspecto de los guardianes porque aún no es momento para ustedes. Pero sepan que cada vértice elemental genera a su alrededor un pequeño semiplano conformado por los dos elementos que dicho vértice tiene como objeto reunir. Por eso los vértices elementales, en un principio, cambian de localización constantemente: deben formar muchos de dichos semiplanos. La materia de los planos elementales se incorpora al plano en formación (conocido como Plano Combinado) a través de tales semiplanos.
“Esos semiplanos se van uniendo entre sí, conformando uno cada vez mayor, hasta que llega un punto en que es lo suficientemente grande para seguir creciendo por sí mismo. A partir de entonces, los vértices toman una posición en el centro del semiplano correspondiente y dejan de moverse. Es un momento crucial en la formación de cualquier plano combinado, un parteaguas.
“Y ese momento se acerca. Es difícil predecir exactamente cuándo sucederá, pues depende del equilibrio de los elementos como conjunto, pero no creo que tome más de un año a partir de ahora, y tal vez sea mucho menos… posiblemente cuestión de semanas.
“¿Y qué pasa con los planos combinados cuando terminan de formarse? ¿Cuáles son las otras funciones de planos y semiplanos elementales en cada plano en formación, además de aportar los elementos que lo van conformando? ¡Averígüelo en el próximo vértice!”
Lodoso sonríe, satisfecho, y concluye: “Bueno, es todo por hoy. Sus amigos los esperan fuera del vértice, así que tomen las precauciones necesarias. Mucha suerte y no olviden leer sus cuadernitos… Ah, y tal vez necesiten esto en un futuro cercano”. Lodoso hace un ademán y sobre la plataforma donde están aparece un círculo de lodo duro, de unos 2 m de diámetro y 20 cm de grosor.
Fin de la sesión, a las 14:15 de 31 Lodo 13307.
3000 xp por cabeza (menos Agra y Sly)
Agra y Sly: 1000 xp
Miztli: 719,017
Alexandir, Belarak: 716,217
Aria: 713,717
Sly: 710,717
Agra: 709,633
Comentarios
1) Summons
No desaparecen si tú desapareces o te alejas. Lo único es que una criatura summoneada no puede summonear, no puede teletransportarse ni planeshiftearse y no puede usar ningún spell ni spell-like ability que emule un spell con componente material caro (así que el shadown demon no puede usar magic jar, por ejemplo).
2) Sly en el remolino
El remolino ya estaba construido: a los tres swim check seguidos que falles, el remolino te empieza a chupar. Como todo el cuarto es remolino de agua turbia y no hay visibilidad a más de 5’, es difícil darse cuenta al principio (cada vez es más fácil). Una vez que te empezó a jalar, swim check exitoso te permite subir pero fallido te hace bajar, hasta que alcanzas el nivel de las puertas otra vez, momento en el cual quedas “libre” y tienes que fallar otra vez tres checks seguidos para que te empiece a jalar hacia abajo. Desde que te empieza a jalar, tres rondas para llevarte hasta el fondo. Al llegar al fondo, Ref save para no ser tragado: al principio igual que los otros (DC 23) pero la DC aumenta en 1 cada ronda.
Pero a la vista de lo que comenta el Lodoso, es evidente que Sly se pasó de ambicioso, despreciando los posibles peligros del remolino, y también pensó poco en los demás: si iba a dejarse llevar para atrapar gemas, ¿para qué le pidió a Miztli que lo transportara al otro lado en un principio? Ese viaje adicional que ultimadamente no cumplió ningún propósito fue lo que hizo que Miztli terminara cayendo, lo que finalmente no tuvo consecuencias graves pero podría haberles costado el vértice a Miztli mismo o a Belarak, o a ambos…
Digo esto para que lo tomen en cuenta en vértices futuros.
3) Vértices futuros
Si bien Agra y Sly ya quedan fuera de los vértices, se puede establecer una dinámica para que el grupo los siga visitando: en cuanto a personaje, Blacky y Juanes pueden jugar un verticero “emergente”, que puede ser “hermano gemelo” de sus personajes actuales o servir para probar otras alternativas. In-game, los que aún tienen permitido visitar vértices pueden cooperar para que Agra y Sly tengan una compensación económica; suena natural para que no haya mucho desbalance entre los miembros del grupo.
4) Recuerden que los vértices elementales siempre dan poca experiencia (pues no hay riesgo “real”) pero dan premio, y cada vez mayor.
5) Premio
In-game, el Lodoso les otorga algo. Para que sea algo que les guste, en meta el jugador elige entre:
– item core de hasta 65k
– item no core de hasta 30k (sujeto a revisión; si lo veo muy game-breaking, no se acepta)
– retrain feat, domain o class feature por opciones core
– un spell no core de hasta max nivel que puedan castear
– dos spells no core de hasta (max nivel que puedan castear) – 2
6) Project Image
El principal uso de ese hechizo es poder observar y castear manteniéndote a salvo. Su utilidad aumenta si estás oculta al momento de castearlo, pues entonces los enemigos creen que tú eres la imagen. De hecho, Belfo pensaba apoyarse fuertemente en esa estrategia, pero no se lo permitieron (ver siguiente comentario).
Como lo usó Aria, tenía la ventaja de cubrir un área mayor para castear hechizos de rango corto, pero nada más. Siento que con un poco de preparación podría haber sido más útil.
7) Belfo
Combate contra CR 16, que normalmente no representaría problemas, aún siendo sólo cuatro. El entorno favorecía al dragón pero no tanto, pues todos podían volar o nadar bien, y el Lodoso decidió no enturbiar el agua. Además, tenían la ventaja de haberse podido buffear con antelación, mientras que Belfo no.
Entonces su estrategia era engañar con la bola de lodo, huir invisible y buffearse durante varios turnos; después greater invisibility, project image ¡y a atacar! Pero Los Papachongos no nacieron ayer y no lo dejaron. Aún así, cometió varios errores, principalmente porque lo atosigó demasiado la marabunta de summoneados (a él in-game y a mí en meta; debí haberles dado control de los tokens y haberme desentendido del asunto… al principio hasta los hp les iba contando).
Un gran error fue, justamente, ocuparse de los summoneados, que ni lo tocaban. Gastó dos turnos cuando aún tenía sus protecciones (las que había alcanzado a ponerse: mage armor, shield y mirror image) en tratar de destruirlos, y creo que apenas a uno se llevó. Ése era tiempo precioso para buffearse o atacar a los verdaderos malos: Los Papachongos.
También, tras el greater dispel que resultó efectivo, le convenía huir y volverse a poner esas tres protecciones básicas, pero se confió. No trató de dispelear él el faerie fire porque no estaba tan fácil, y cada intento le costaba una preciosa standard action (además de un spell slot).
Aún no estando invisible y siendo perseguido por la manada de summoneados, debería haberse casteado eagle’s splendor y haberlos mermado con enervation antes de intentar los spells más poderosos, como era su plan original.
Otro error, que terminó costándole la derrota, fue no castear freedom of movement en cuanto quedó entangleado por el lodo del mud elemental. Ya sin protecciones y con ese -4 a la Dex, no estaba tan difícil pegarle y así lo pagó.
Un comentario sobre el bestow curse de Miztli: si bien el hechizo no entró, así que no hubo diferencia, contra un grandote que está muy herido el mejor curse es -6 a la Con: si tiene muchos HD y está ya muy lastimado, con -3 hp/level casi seguro lo matas.
Y un comentario sobre el glitterdust de shadow conjuration que lanzó el shadow demon: no pasó la SR, pero no quería que fuera inmediatamente evidente cuál era el valor exacto, por eso “hice los tiros requeridos en secreto”, je je.