Quincuagesimoquinta sesión

 

La sesión empieza después del combate con los escarabajos gigantes que tienen mandíbulas como espadas. Están heridos y han gastado varios hechizos, además de que Boram debe aplicar su ritual de subida de nivel, así que deciden esperar un par de días.

Se internan en el pastizal pero no se alejan mucho. El día pasa sin contratiempos. Al día siguiente, Boram sube mientras Alexandir termina de transcribir hechizos. Durante la siguiente noche, sueñan con un diamante, dentro del cual hay una llave…

Al despertar, ven a un semielfo que se acerca. Tiene una cota de malla élfica de mithril, látigo y longsword, y un laúd en las manos, que toca mientras tararea. Es todo un virtuoso. Les dice que se llama RoWi, y que soñó que ellos lo acompañarían a un lugar especial, para el cual tiene una llave. La llave es de unos 10 cm de largo, de cristal poco quebradizo, y tiene un brillo morado, que se intensifica al acercarse a la puerta que puede abrir.

RoWi los guía utilizando la llave. No muy lejos, en el margen del pastizal, se detiene en un punto y empieza a cavar. Algunos le ayudan. Después de unos 3 m, ven una puerta de cristal con cerradura. RoWi inserta la llave, la gira… y la puerta se corre hacia un lado repentinamente, así que el bardo cae 12 m por un túnel de cristal y se lastima un poco. Los demás colocan un pitón, amarran una cuerda, le hacen nudos a intervalos regulares y bajan con facilidad, salvo el paladín, que utiliza su anillo de feather fall.

El túnel por el que bajan es angosto, de unos 1.5 m de diámetro. Llegando al suelo, ven que abre un túnel ancho, de 4 ó 5 m de diámetro, de techo abovedado y suelo plano, que tuerce a la derecha después de unos metros. Pronto constatan que en ese lugar la gravedad no es subjetiva. Caminan y pronto encuentran una puerta de cristal, de dos hojas. La tocan y se abre, dejando ver un cuarto (de cristal, por supuesto), con un túnel al fondo, en cuya entrada hay un ser grande de cristal, de forma humanoide.

El ser cristalino les pregunta la razón de que estén ahí. Le parece bien que tengan la llave, pero insiste en que deben probar que tienen derecho a estar ahí, combatiendo con él. Acto seguido, ataca. El combate resulta difícil: las armas no parecen hacerle el daño que debieran, se confunde con el material del cuarto y eso provoca que fallen más fácilmente pero, sobre todo, la magia no parece tener efecto alguno sobre él.

Por si fuera poco, cada tanto emite un brillo especial durante corto tiempo, pero mientras está así regresa al caster cualquier spell del que sea target, como pudo comprobar el druida. Sus “manos” son como espadas de cristal aserradas, y las heridas que provocan siguen sangrando hasta ser restañadas o curadas mágicamente.

Sthlyfaugh ataca, aunque no logra flanquearlo. Casi cae, pero su rogue resilience lo salva y logra regresar con los arqueros, donde lo cura Boram. RoWi, después de tratar fallidamente de afectarlo con magia, intenta tirarlo con su látigo, pero no lo logra. Belarak insiste con los spells y le receta todo su repertorio, incluyendo la invocación de un tigre y cuatro elementales de tierra pequeños, que lo mantienen ocupado y evitan que ataque a los miembros del grupo. Alexandir y Boram disparan sin cesar y son quienes, poco a poco, lo van mermando, haciendo saltar pedacitos de cristal con sus certeras saetas.

Finalmente, un flechazo lo hace tronar en mil pedazos. Todos menos Boram están heridos, así que el paladín cura y canaliza, además de que Sthlyfaugh logra utilizar exitosamente, al segundo intento, su varita de CLW. Han gastado varios recursos pero están completos y animados, así que continúan por el túnel que tienen enfrente.

El túnel pronto tuerce hacia la derecha y llega a una puerta cristalina de dos hojas, como la anterior, pero que tiene un cuenco pequeño en donde se juntan las hojas. También tiene unas inscripciones: la del lado izquierdo en auran, la del derecho en terran. Ambos textos dicen lo mismo: “Una de las doce monedas pesa distinto que las otras once. Colócala en el cuenco. Por ningún motivo coloques otra cosa en ese cuenco. Puedes utilizar la balanza cuatro veces.” Frente a la puerta hay una balanza de oro y doce “monedas” gruesas, de cristal.

Boram está muy cansado por tantas canalizaciones, así que decide meditar un tiempo. Belarak y RoWi se abocan a discernir cómo identificar la moneda distinta con cuatro pesadas. Sthlyfaugh participa al principio, pero después decide ir a recoger pedacitos de cristal en el otro cuarto (otra vez, solo y separado del grupo…).

Alexandir, con una mano en la cintura, recita una docena de métodos infalibles para descubrir la moneda distinta, mostrando así que realmente es el hermano de Icanor. Por ejemplo, una de las opciones consiste en que Boram compre una cosa con cada moneda y utilice después algún poder paladinesco; asumiendo que la distinta es “falsa”, cuando pague con ella estará estafando al vendedor, rompiendo así su código de conducta y consecuentemente perdiendo sus poderes…

Belarak y RoWi logran identificar un grupo de cuatro monedas donde está la distinta, y saben que ésta pesa más que las otras. A partir de ese momento, ya no se ponen de acuerdo. RoWi propone un método que sí funciona, ignorando que la distinta pesa más, pero no es capaz de explicarlo claramente. Belarak propone finalmente una forma que sí utiliza esa información. La aplican, identifican la moneda en cuestión y la colocan en el cuenco.

En cuanto la ponen, se abre la puerta, una hoja se corre hacia cada lado, como en el caso anterior. Ven un cuarto en forma de cilindro con las esquinas redondeadas. La puerta está en el centro de uno de los círculos extremos, y enfrente hay otra, con una cerradura. Todo el cuarto, con excepción de unos 3 m alrededor de las puertas, está cubierto por arbustos. Las plantas están llenas de frutos, que en realidad son gemas rojas, como rubíes.

Fin de la sesión, en 1° Frío 13306.

1200 xp por cabeza

Comentarios

Fue un error poner un problema a altas horas de la madrugada. Deben ser al principio de la sesión, como el anterior. El problema original, con tres pesadas, me lo pusieron en el segundo semestre de la carrera. Me tardé como dos días en resolverlo, pero lo que sí salió rápido fue cómo hacerlo con cuatro pesadas. Por eso consideré que con cuatro sería adecuado para la sesión.

 

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Masteraje

Gerkunakkar (53-59)

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