Al comenzar la sesión, Algrosh, Amaguq, Anathiel e Icanor están en retirada, ante el ataque de los hongos de color morado. Se alejan y contratacan, haciendo algo de daño y sin recibir nada. En un momento, los hongos móviles dejan de perseguirlos y regresan a la zona de huesos y hongos estáticos. Los cuatro deciden salir de la cripta.
Mientras tanto, Haken y Yar-Osse llegan a la zona desde el norte. Miran la gran puerta de bronce, abierta. Encuentran una mula amarrada a un árbol, sola. Se acercan con cautela y la revisan. Contra el tronco del árbol, hay objetos cubiertos con una lona. Haken se asoma y ve, básicamente, bolsas de dormir y un saco que parecería tener monedas.
En eso están cuando los otros cuatro salen corriendo de la cripta. Algrosh les pregunta que qué hacen con su mula y sus pertenencias. Hay cierta aspereza, pero poco a poco se van entendiendo unos a otros. Mientras tanto, Anathiel cierra la puerta, cual suelen hacer cuando salen. Más tarde, Yar-Osse pregunta varias cosas a Anathiel, como la naturaleza de la cripta y la razón de que se ande paseando con un orco por ahí, como si nada.
De repente, detectan a un grupo de humanos armados que se acerca. Uno tiene plate mail y es quien se dirige al grupo, saludando y proponiendo que acampen juntos. Los otros ocho usan breastplate. Todos tienen escudo grande y una espada bastarda, envainada, además de un arco empuñado. Los ocho cargan también una maza con cadena y bola (flail).
No queda claro si son peligrosos o cuáles puedan ser sus intenciones verdaderas. Se acercan cada vez más. Entonces Haken ordena con firmeza que se detengan, empuñando el arco. Se detienen, en efecto, y el que parece ser el jefe bosteza, subiendo los brazos. Al bajarlos toma una flecha de su carcaj y dispara. Claramente es una señal: los ocho también disparan. Todos continúan acercándose.
El grupo responde al fuego, con poco éxito. Entonces el mago produce un hemisferio de niebla oscura, y se guarece dentro. Los demás lo siguen poco a poco, pues la lluvia de flechas es tupida. Yar-Osse se asoma y le conecta un magic missile al jefe, quien le contesta con tremendo flechazo.
Icanor, probablemente afectado por las energías de la cripta, como ya se había notado y él mismo había afirmado, sale corriendo y aullando en cuanto empieza la batalla, como alma que lleva el diablo. Después se esconde, pero sigue aullando, y más tarde decide emprender la huida de nuevo.
Después Yar castea un hechizo y designa a su familiar como portador de la carga. Le indica que ataque al jefe. La comadreja falla la primera vez, pero es detectada y recibe un espadazo. La segunda vez logra tocar al jefe, pero éste responde, partiéndolo a la mitad con la ayuda de otros tres, a quienes había llamado específicamente para eso.
Mientras, los otros cinco siguen avanzando y se acomodan en línea para disparar todos al mismo tiempo contra la niebla. Haken se asoma y los ve; regresa a la oscuridad y les avisa a los demás. Amaguq sale por el otro lado, para encontrase cara a cara con un hobbit, que lo ataca. Algrosh arremete contra los arqueros.
Entonces la niebla se disipa. Los guerreros rodean a Algrosh y lo atacan con saña, utilizando sus espadas bastardas. El jefe también se aproxima, pero tira un tajo con torpeza y se le cae la espada. Bazarak, el caballo de Haken, se dirige a un guerrero y le receta tremenda coz. Amaguq y Jorge atacan al hobbit, quien se retira. Yar conjura una plaga de ratas sobre Algrosh y algunos de los que lo están rodeando, con tan mala suerte que el orco se desespera y trata de quitarse las alimañas de encima, mientras que los otros tres afectados logran controlarse y atacar al bárbaro. Mientras tanto, Anathiel alterna entre canalizar energía, para curar a los heridos, y lanzar fire bolts contra los enemigos que ve lastimados.
Jorge y Amaguq persiguen al hobbit, que continúa escabulléndose. Bazarak ataca de nuevo, dejando a uno fuera de combate, pero recibe también. Haken apoya con flechas certeras. Yar castea grease en la zona donde se encuentra Algrosh y algunos de sus atacantes. El jefe trata de salir de la zona engrasada, pero no lo logra. Los que están cubiertos por las ratas se desesperan, tratando de quitárselas, con excepción de Algrosh, que también trata de salir de la zona resbalosa sin conseguirlo.
Algrosh recibe varios golpes, además de las mordidas de las ratas, y cae. Las ratas se lo siguen comiendo hasta que muere. Anathiel trata de hacer algo pero se da cuenta de que es demasiado tarde. Fallece así Algrosh el Destructor, quien matara un ogro en cinco segundos y cinco ciempiés sin recibir daño y un oso de un solo hachazo, además de realizar varias otras hazañas relativas a arctántropos y monóculos, a puertas animadas y cadáveres vivientes.
En ese momento, Yar recibe un fuerte espadazo, de manera que pierde la concentración y la plaga se disipa. Amaguq va contra los que habían rodeado al orco, mientras Jorge persigue al hobbit. Bazarak se retira del combate, muy herido. Haken continúa disparando con éxito. Anathiel canaliza y lanza fuego.
Entonces Yar da un paso atrás y… conjura otra plaga de ratas, ahora sobre sus atacantes. Un guerrero carga contra Haken. Jorge va con Amaguq y lo apoya. El jefe de los atacantes no ha logrado salir del área resbalosa…
Fin de la sesión, a medio combate.
50 XP por cabeza, por la mini-aventura “Conocer a los nuevos… ¿amigos?” XD
Notas
1) El flanqueo es, en efecto, como dijo Blackfire. Cabe notar que, en este caso, no hubo diferencia porque lo atacaron cinco ese round, todos con la misma iniciativa. Sólo que resultaba más “realista” que atacaran primero los dos que ya estaban ahí, mientras los otros se movían. Revisé 3.5 y la regla es igual. Estoy casi seguro que en 3.0 era como yo dije, pero no tengo el libro aquí y no lo encontré gratis en línea. Aunque me parece poco intuitivo, lo manejaremos como viene en el libro.
2) Iniciativa: cuando hay muchos enemigos, es mejor tirar iniciativa por grupos, para agilizar el combate. La desventaja es que, de repente, pueden atacarte 5 al mismo tiempo, como a Algrosh. Aunque te fueran a atacar los mismos 5 en ese round, no es lo mismo que lo hagan con la misma iniciativa. ¿Qué opinan al respecto? Lentitud + realismo + no ataque “mega-masivo” vs. agilidad en la mecánica? Opiniones, por favor, aquí o en foro aparte.
3) No discutiré mucho en meta-juego este combate por ahora, pues aún sigue. Quiero hacer notar lo siguiente:
— ¡Cuidado con los amigos! En general, 1 hp aliado equivale a unos 10-15 hp enemigos. Esto es porque ustedes son héroes en peligrosas aventuras, así que en un combate promedio, la suma de los hp de todos los enemigos suele ser sensiblemente mayor que la suma de los hp de todos los miembros del grupo. Las “jugadas de sacrificio” sólo deben realizarse en circunstancias muy especiales.
— Creo que esconderse en la oscuridad fue pésima idea. Es como las avestruces que entierran la cabeza cuando hay peligro (claro que no lo hacen en la realidad, es sólo una conseja de suegra). Dieron a los enemigos el tiempo para acercarse y tomar posiciones. Yo esperaba que tumbaran a un par mientras se aproximaban, pues hay buen nivel de arquería en el grupo (mejor que el de los enemigos). Además, cabía sospechar que querían acercarse, pues lo hicieron sin combatir hasta que se les marcó un alto definitivo. La niebla sirve para no ser detectados, como un medio para escapar o como herramienta táctica en combate. Quedarse ahí guardados un minuto sin hacer nada, no tiene sentido.
— Como han hecho ellos, y como ustedes suelen hacer, conviene atacar a uno entre varios y, cuando caiga, seguir con otro. Esto no aplica en un combate real, pero sí definitivamente con las reglas del juego como están. Por alguna razón, se generó confusión y el fuego ha sido muy disperso.