Empieza la sesión cuando acaban de sacar a Sthlyfaugh de las entrañas del behir. Después de comprobar que ha muerto, retiran su equipo y meten el cadáver a un bag of holding, sólo con su ropa.
Deciden seguir el rastro de los behires hacia su guarida, pues saben que suelen acumular tesoro. No es tan difícil, a pesar de la lluvia, y comprueban que los bichos los estuvieron siguiendo durante casi todo un día. En un momento el rastro de los reptiles eléctricos se desvía hacia la loma grande que vieran el día anterior. Lo siguen y llegan a una cueva cerca de la cima de la loma. La cueva es natural, con pocas porciones excavadas. Dentro encuentran algunas cosas de valor y cuatro huevos grandes, de color azul metálico. Recogen todo y emprenden el regreso.
Bajando la loma ponen el rope trick y descansan. Al día siguiente continúan hacia el lugar del primer ataque. A medio camino son emboscados por tres behires. Después de electrocutarlos, uno atrapa a Boram y se lo traga, matándolo. Otro agarra a Ourum pero no logra ensartarle las garras, gracias a un glitterdust de Alexandir, quien también está ya a punto de caer cuando finalmente logran dar cuenta de las serpientes con patas.
Rápidamente abren a la que se tragara al hobbit, y además de su cadáver encuentran restos de un semielfo… ¡que es Sthlyfaugh! ¿Pero no estaba en el bag of holding? Sí; ahí está el cadáver ya ligeramente apestoso del rogue… Deciden tirar el cuerpo apestoso (con todo y ropa) y llevarse al nuevo cadáver del semielfo, repartido en pedazos entre los tres behires; también meten el cuerpo de Boram al bag of holding.
Continúan caminando hasta el lugar del primer combate y después otra hora más, borrando su rastro, antes de poner el rope trick para descansar. Antes de subir al espacio extradimensional, acomodan los pedazos de Sthlyfaugh y el cuerpo de Boram para ver si algo le sucede durante la noche. A la mañana siguiente, Alexandir conjura tres lantern archons para que salgan a echar un ojo. Regresan y afirman no haber visto nada. Entonces sale Belarak convertido en elemental de aire pero tampoco nota ninguna amenaza: sólo los pedazos de rogue y el cadáver del hobbit.
Bajan entonces todos y el druida se eleva 150 m para observar el terreno. Encuentra un camino ancho de piedra, no muy lejano, en la dirección que llevaban originalmente, y al escrutinar hacia el otro lado… nota a un humanoide desnudo, alejándose de él. Se acerca y reconoce… ¡a Sthlyfaugh! Lo alcanza y nota que el semielfo está un tanto confundido. Se transforma en pteranodonte y lo carga de regreso a donde esperan los demás.
Sthlyfaugh relata que abrió los ojos, estaba saliendo el sol. Fue atacado por tres behires y falleció. Luego abrió los ojos, estaba saliendo el sol… pero nadie lo atacó. Se levantó. Estaba solo en el lugar del primer combate. Empezó a seguir precavidamente el único rastro que encontró y entonces lo abordó Belarak convertido en elemental de aire.
Entonces se dan cuenta de que en ese lugar se renace diariamente, en el lugar donde uno murió. El rogue y los behires renacieron el día anterior, y los reptiles se lo comieron otra vez. Iban a su guarida cuando vieron al grupo y lo emboscaron, matando a Boram. Acaban de revivir todos en el lugar del segundo combate y seguro ya se volieron a comer a Boram.
Se dirigen entonces al lugar del segundo combate, a unas cinco horas de distancia. En efecto, no hay cadáveres. Piensan que tal vez los behires, al descubrir que robaron su tesoro y sus huevos, vayan a buscarlos nuevamente. Matar no es nada, robar sí es grave. Belarak, aún en forma voladora, se eleva y observa. Nota que vienen los behires a toda velocidad, siguiendo el famoso rastro que ya casi parece autopista. Entonces deciden emboscarlos. Calculan que tienen unos cinco minutos para prepararse, cuando menos.
Fin de la sesión, en 32 Viento 13306.
1800 xp por cabeza